La norma establece requisitos para: 

• Calidad del agua: La norma establece límites máximos permisibles para parámetros como el pH, la turbiedad, la concentración de cloro libre y la presencia de microorganismos patógenos. El pH debe estar entre 7.2 y 7.8, y la concentración de cloro libre debe ser de al menos 0.5 mg/L. 
• Desinfección: La norma requiere que las albercas tengan un sistema de desinfección adecuado para garantizar la eliminación de microorganismos patógenos. Los sistemas de desinfección pueden incluir la cloración, la ozonización o la radiación ultravioleta. 
• Mantenimiento: La norma establece requisitos para el mantenimiento regular de las albercas, incluyendo la limpieza y la desinfección de las superficies y el equipo. El mantenimiento regular es fundamental para prevenir la acumulación de suciedad y microorganismos patógenos. 

La norma es importante para garantizar la salud y la seguridad de los usuarios de las albercas y centros de recreación acuática. Al cumplir con los requisitos establecidos en la norma, se puede prevenir la transmisión de enfermedades y garantizar un entorno seguro y saludable para los usuarios. La norma también ayuda a proteger la inversión en las instalaciones y a mantener la confianza de los usuarios. 

El no cumplimiento de la norma puede tener consecuencias graves, incluyendo la transmisión de enfermedades y la pérdida de la confianza de los usuarios. Las autoridades sanitarias pueden imponer sanciones y multas a las instalaciones que no cumplan con los requisitos establecidos en la norma. 

Si quieres más información a continuación te compartimos el catálogo para control de calidad en aguas donde se incluyen todos los productos que MCD LAB tiene para ti.  

¡Contáctanos ahora!